Cómo hacer una presentación sin sobreestimular al público
No hay nada peor que ser bombardeado con demasiada información a la vez. En una presentación, mantener el interés y la atención del público es más importante que nunca, pero cuando se intenta hacer demasiado, se acaba abrumando a la audiencia, que se aleja por completo del mensaje. ¿Cómo mantener el interés del público sin sobreestimularlo?
1. Ceñirse a un esquema
Un consejo clave para hacer una presentación sin sobreestimular al público es seguir un esquema. De este modo, no sólo te asegurarás de que tu mensaje no se desvíe del tema, sino que también te ayudará a controlar el ritmo y a mantener la calma delante de todo el mundo. Una presentación bien organizada debe ofrecer transiciones claras entre los temas, para que a los oyentes les resulte fácil seguirte mientras hablas.
2. Tenga preparado un excersice interactivo
Una de las mejores formas de combatir la sobreestimulación no es la que cabría esperar. Se trata de utilizar ejercicios y actividades interactivos en la presentación. Después de todo, estar sentado durante una hora escuchando a alguien hablar puede ser abrumador (por no decir aburrido), así que es importante cambiar el formato de la presentación para mantener la atención del público. Utilizar quiz questions pueden ayudarte a averiguar si tu mensaje ha quedado suficientemente claro. También puedes utilizar las preguntas abiertas para dejar hablar a tu audiencia. Más información sobre los distintos tipos de preguntas interactivas.](/es/preguntas/)
3. Cumplir el calendario
El subidón de adrenalina que supone hablar delante de un público puede hacernos correr más de la cuenta, pero hay algunas formas de evitarlo. De lo contrario, la gente empezará a perder interés y te resultará más difícil captar su atención. Empieza por planificar cuidadosamente tu charla e intenta no distraerte.
4. Tómate descansos
Asegúrate de hacer descansos. Puede parecer un gran contraste con el punto mencionado anteriormente, pero haz descansos cada 5-10 minutos. Esto ayuda a tu audiencia a mantenerse despierta y alerta, si es que se están cansando de lo que estás diciendo. De hecho, está demostrado que hacer pequeñas pausas de 10 minutos cada hora nos hace más productivos en nuestro trabajo.
5. Preste atención al lenguaje corporal
Es importante prestar atención al lenguaje corporal: si la gente está inquieta o mira el móvil, puede ser señal de que está sobreestimulada. Si notas signos de aburrimiento o desinterés, deja de hablar y haz preguntas en lugar de continuar con tu discurso. La gente agradecerá que se le pida su opinión en lugar de ser sermoneada durante más tiempo del deseado.
Robert Daverschot
Robert es moderador profesional, presentador y coach de oradores. Robert tiene años de experiencia en su país y en el extranjero y trabaja para una amplia gama de sectores. Ha entrevistado a ministros, capitanes de la industria e incluso a Su Santidad el Dalai Lama. En su trato con el público, siempre utiliza Sendsteps. Con él, el público puede expresar sus opiniones, por lo que los asistentes pueden emitir votos o enviar comentarios a los ponentes y paneles en el escenario. De este modo, los actos se convierten en animados diálogos en los que todo el mundo puede expresarse.