Los 10 hábitos de oratoria más molestos que hay que evitar durante una presentación
Cuando se habla ante un público, es fácil caer en malos hábitos si no se es consciente de ellos. Tanto si se trata de una presentación como de una charla informal con los compañeros de trabajo, algunos hábitos pueden frenar la eficacia e incluso molestar al público. Para ayudarte a asegurarte de que tus hábitos orales están a la altura, hemos elaborado esta lista de los 10 hábitos orales más molestos que debes evitar durante una presentación.
1. Risitas
Aunque la risa puede ser contagiosa, debe evitarse durante las presentaciones. Si le cuesta no reírse durante la charla, tómese un breve descanso para recuperar la compostura y prosiga con su discurso. Si te ríes a carcajadas ante el público, darás la impresión de no estar preparado y de ser un aficionado.
2. Poco contacto visual
Al hablar, es importante mantener el contacto visual con el público. Si no prestas atención a nadie y miras constantemente a tu alrededor, parecerá que no te importa lo que tengan que decir. También debes evitar romper el contacto visual al pasar de un punto a otro, a menos que haya algo muy importante.
3. 3. Comerse las uñas
Es fácil descartar el hábito de morderse las uñas por nerviosismo, pero también puede ser un indicio de estrés o ansiedad. Intenta no morderte las uñas durante las presentaciones y, si lo haces, ¡deja de hacerlo! No sólo distrae a los oyentes, sino que también puede hacer que parezcas nervioso. Si tienes que masticar algo, prueba a hacerlo con un chicle o un caramelo.
4. Bostezo
Aunque bostezar es una reacción humana natural, puede tener un efecto adverso en su audiencia. Los bostezos no sólo te hacen parecer aburrido, sino que además son contagiosos. Si empiezas a bostezar durante la presentación, tápate la boca. Asegúrate también de mantener el contacto visual y hablar con emoción. Esto bastará para mantener la atención del público y evitar que se pierda algún punto clave de tu presentación.
5. Frotarse los ojos
Frotarse los ojos (o poner las manos sobre ellos) es un gesto defensivo inconsciente. Puede hacerte parecer inseguro, como si intentaras escapar o esperaras que nadie te vea. También indica que estás nervioso e incómodo, lo que se contagiará a quien te esté escuchando. Así que no lo hagas. Pon las manos detrás de la espalda o delante de ti y no las muevas.
6. Utilizar demasiados gestos con las manos
Uno o dos está bien, pero agitar los brazos no impresiona a nadie. Si lo hace, respire hondo y métase las manos en los bolsillos. Parecerás más seguro y relajado, y eso siempre es bueno para los negocios.
7. Olvidar palabras tartamudear hablar demasiado rápido etc.
Todas estas cosas suelen ocurrir cuando la gente está nerviosa. Para controlar los nervios, concéntrate en respirar hondo y recordar lo que vas a decir. La práctica hace al maestro: cuantos más discursos pronuncies, más fácil te resultará relajarte y decirlos sin sentirte nervioso.
8. No sonreír lo suficiente
El público te estará observando en busca de pistas, así que si pareces nervioso o tenso, ellos también lo estarán. Para sentirte seguro en el escenario y parecer carismático y relajado, ¡sonríe! Los estudios han demostrado que el simple hecho de forzarte a sonreír puede hacerte más feliz. No hay necesidad de forzarlo, sólo tienes que establecer primero tu intención y ver cómo tus músculos responden con facilidad.
9. 9. Mala preparación
La confianza lo es todo en una presentación. Si estás bien preparado y has hecho los deberes sobre el tema del que vas a hablar, puedes estar seguro de que tu presentación será amena y atractiva. Sin embargo, si no estás preparado o improvisas, no esperes ganar adeptos ni establecer contactos. La práctica hace al maestro, así que practica todo lo que puedas antes de ese gran discurso.
10. Ninguna interacción
A veces, los oradores se ciñen a las diapositivas o se limitan a leer textualmente su ponencia. No sólo es más fácil para ti si no tienes que escuchar tan atentamente, sino que además es aburrido. Las presentaciones interactivas mantendrán tu atención y probablemente harán que más miembros del público se interesen por lo que tienes que decir. Una buena forma de conseguirlo es utilizar un [sistema de respuesta del público](/es/blog/cuáles son las ventajas de un sistema de respuesta del público/). Este software le ayuda a generar Word Clouds, Q&A's o encuestas online durante toda la presentación. Esto mantendrá al público en vilo.
Robert Daverschot
Robert es moderador profesional, presentador y coach de oradores. Robert tiene años de experiencia en su país y en el extranjero y trabaja para una amplia gama de sectores. Ha entrevistado a ministros, capitanes de la industria e incluso a Su Santidad el Dalai Lama. En su trato con el público, siempre utiliza Sendsteps. Con él, el público puede expresar sus opiniones, por lo que los asistentes pueden emitir votos o enviar comentarios a los ponentes y paneles en el escenario. De este modo, los actos se convierten en animados diálogos en los que todo el mundo puede expresarse.